# Él.

-No hace falta que me digáis que él tiene esa sonrisa, y esas maneras. Le he visto serio, ser él mismo, y enserio que eso no se puede escribir en un poema. Por eso, eso que me cuentas de que "mírale, como bebe las cervezas", todo eso de que él puede llegar a ser ese puto único motivo de seguir viva, todo eso de que los besos de ciertas bocas saben mejor, es un cuento que me sé desde el día que me dió dos besos y me dijo su nombre. Pero no sabéis lo que es caer desde un precipicio, que él aparezca de golpe y de frente para decirte: "venga, levanta y me lo cuentas". No sabéis lo que es despertarte y que él se retuerza y bostece, luego te abraze, y luego no sepas como deshacerte de todo el mundo. Que yo soy la que pierde la cabeza por sus ojos, el sentido por sus palabras, y el aire por un mínimo roce de mejilla. Que cuando él cruza por debajo del cielo, solo la tonta mira al cielo, que sé como agacha la cabeza, levanta la mirada, y se muerde el labio superior, que conozco su voz en formato susurro, en formato gemido y en formato secreto. Que me sé sus cicatrices y el sitio que le tienes que tocar en el este de su pie izquierdo para conseguir que se ría. Que he memorizado su número de teléfono y también el numero de los escalones de su casa. Que no solo conozco su última pesadilla, también las mil anteriores. Y es que no tengo el valor suficiente para decirle que no a nada porque tengo más deudas con su espalda de las que nadie tendra jamás con la luna. Que sé la cara que pone cuando se deja ser completamente él, rendido a ese puto milagro que supone que exista. Que le he visto formar un charco de arena rompiendo todos los relojes que le puso el camino y le he visto hacerle competencia a cualquier amanecer por la ventana. Que solo los sueños pueden posarse sobre las cuatro letras de su nombre. Que razones para quedarnos mirándole tenemos todas, pero yo, muchas más que ninguna.

# Pérdidas.

- Hoy es el peor día de mi vida. Hoy es uno de esos días en los que te planteas la pregunta de: ¿y para esto merece la pena vivir? Todo el mundo te dice que seas fuerte, que no seas tonta, que todo esto se va a pasar. Pero eso es lo que se suele decir en estos casos ¿no? Eso es lo que se le suele decir a una amiga cuándo está mal, sí, porque es tu amiga y lo último que deseas en el mundo es verla mal. Pero aún así todo el mundo sabe que no es fácil pasar de todo, no darle importancia, hacer como si no hubiese pasado. No, no es nada fácil, y menos cuándo están en juego tus sentimientos. Sí, los sentimientos, eso que hay dentro de nosotros y que a veces nos hace sentirnos super bien, otras veces nos hace sentirnos tristes, otras veces nos hacen sentir odio e incluso a veces nos hacen sentir enamorados. Enamorados, una plabra fuerte ¿verdad? Es una de esas palabras que no te atreves a decir así, sin mas, que tienes que sentirlo de verdad para poder decirla, porque te da un poco de miedo decirla y que todo el mundo se te quede mirando. Precisamente eso, el amor, es lo que a veces nos hace cometer locuras, hacer las cosas sin pensar, pasarlo mal, sonreír... El amor es ese sentimiento que hace que nuestro corazón se acelere cada vez que ves a esa persona, que hace que te falte el aire cuándo él te habla, que hace que veas el mundo de otra manera. Amor no es simplemente una plabra, es mucho más que eso, el problema está en que no te das cuenta del significado verdadero hasta que pasa algo que te hace pensar que el amor es el peor sentimiento que hay en el mundo. Sí, como lees, el peor sentimiento, ya que engloba a todos los demás y hace el sentimiento de dolor aún más fuerte cuando necesitas que ese sentimiento de dolor sea lo más débil posible porque no quieres pasarlo mal, no otra vez no. Y tienes miedo, miedo de que pase lo que siempre suele pasar, que pierdes a esa persona, pero tarde o temprano pasa y tú sientes impotencia, impotencia de no poder hacer nada, impotencia de sólo poder ver como esa persona está cada vez más y más lejos de ti, de ver como le estás perdiendo por momentos y no poder gritar: "¡Espera, no te vayas todavía, yo te sigo queriendo!", pero no lo puedes gritar y esa persona desaparece de tu vida tan rápido como apareció, con la única diferencia de que cuándo apareció no era apenas importante para ti y ahora es una de las personas más importantes que forman parte de tu vida.

# Sueños.

- Me conmuevo al contemplar un amanecer, daría lo que fuese por un verdadero amigo sin sentirme pobre por ello. Danzo con la vida, la invito a bailar, la abrazo sin excederme, la miro a los ojos y la respeto y la amo, al igual que adoro la mirada de un chico enamorado. Eso es. Me gustaría estar en esa mirada, dentro, siempre, ser su sueño.

Prométemelo.

- No nos distanciaremos nunca ¿verdad?
+ Como la Luna y las estrellas...
- Siempre en el cielo azul. ¡Como tú y yo!

# Tal vez casualidad.

No hay nada más bonito que lo que empieza por casualidad y acaba bien.

# Te compré sirvientes para que pintasen el cielo de azul.

- Nunca quise las estrellas. Nunca disparé a la luna. Me gustan justo donde están. Todo lo que quería era a ti. Así que, tan solo aléjate cariño porque no puedo enfrentarme a la verdad. En fin, lo único que intento decir, es que tu eras todo lo que yo quería.

Las cosas cambian.

- Siempre, cuando piensas que lo tienes completamente todo, cuando realmente eres feliz, las cosas cambian de rumbo, se desvían. Entonces pasa, pierdes a alguien, a una persona a la que realmente quieres, una persona que es importante para ti. Y desaparece así, sin dar ninguna explicación. Tal vez el destino estaba escrito así. Pero ahora mismo me encantaría tener una goma de borrar y un rotulador permanente. ¿Que para qué quiero tener eso?, pues para borrar todos mis errores, para borrar el destino, para que las cosas no se desvíen. Y el rotulador permantente lo quiero para volverlo a escribir, para escribirlo como realmente quiero que sea, y que nadie sea capaz de borrarlo. Vale eso no puedo hacerlo, pero si de verdad pudiera hacerlo, si de verdad pudiera cambiar el destino, no lo dudaría ni un solo segundo, estoy completamente segura de que lo haría.

# Miedo de afrontar la realidad.

Dime que no, dime que esto no ha acabado así, dime que no ha terminado con un simple adiós. Dime que te importo más de lo que realmente pienso, dime que vas a estar ahí, que simplemente ha sido una mala racha, dime que no quieres que termine. Por favor, dime que estoy soñando, que nada de esto está pasando, que no te estoy perdiendo por momentos, que sólo son imaginaciones mías.

Vivir.

- Sí, vivir es partirse de risa con una persona a la que quieres y que te hace sentirte querida.